martes, 8 de febrero de 2011

LAS ENERGÍAS DE FEBRERO


Vamos dejando un mes que nos hizo volver la atención a nuestros asuntos prácticos y materiales y en la mayoría de los casos, hubo que hacerles frente y avanzar aún con los obstáculos o confusiones que pudieron haber habido, confusiones normales si tomamos en cuenta que vamos iniciando el año con un vertiginoso movimiento de energía que nos obliga a multiplicar nuestras nuevas creaciones sobre la marcha y sin tiempo para detenernos a pensar como solíamos hacerlo antes (que de tanto pensar, se iba la oportunidad). Parece que ahora, sobre el deseo, va la acción a través del impulso.

Y entramos al mes de febrero, en plena energía de cambio, totalmente revolucionada y a 10 000 por hora, que nos permite abrir nuevas fases de éxitos, expansión y creatividad. Las puertas se abren y lo que ha de suceder sucede sin mayores tensiones ni preocupaciones.

Esta oportunidad, verdaderamente espectacular, se ha venido gestando por una profunda necesidad del alma de por fin, dejar de negarse a si misma y comenzar a cuestionar la vida, acabando con aquellas actividades o circunstancias que van en contra de si misma. Hay una profunda necesidad del alma de reencontrarse con ella misma, en un reencuentro amoroso.

Por mucho tiempo hemos obedecido reglas sociales y formas de vida preconcebidas donde hemos dedicado nuestra vida, especialmente al mundo laboral, viviendo para trabajar y haciendo del trabajo nuestra prisión. Limitados a trillados viejos caminos antes de experimentar caminos diferentes por miedo a hacer que el viejo esquema se nos moviera pues ahí se afianzaba nuestra seguridad. En el fondo, estamos cansados de las viejas rutinas las tareas que implican un sacrificio. El alma comienza a despertar y a mover las circunstancias para ponernos cara a cara, con nuevas oportunidades y formas de existencia, nuevas formas de experimentar la vida y desarrollar nuestros dones, haciendo de nuestro trabajo, no solo una forma de experimentar placer, sino también, una forma de expandir nuestras cualidades y dones, además de ser nuestro sustento, pero ahora si, un verdadero SUSTENTO.

Llegó el momento de afirmarnos. Es posible que tengamos deseos de rebelarnos y romper lo que consideramos nuestras cadenas de manera repentina para después pasar a la comprensión de las cosas y finalmente buscar la expresión práctica de lo que se quiere o no se quiere, elaborando desde el corazón, objetivos precisos y claros. Es importante saber romper con todos nuestros apegos en esta fase para poder fluir ante los cambios en esta nueva fase, sobre todo, cuando dentro de estos cambios se tiene que soltar, ya sea un trabajo, una casa, una ciudad, amigos, pareja, etc. Todo lo que ya no pueda evolucionar a nuestro lado o no nos permita evolucionar, todo lo que necesita trascenderse o pulirse, todo lo que necesite CAMBIO.

Si entramos de lleno a este proceso, esto nos llevará a vivir una serie de éxitos en asuntos materiales que vienen de la mano de satisfacciones internas y equilibrio económico. Un camino de crecimiento personal en donde habremos trascendido el trabajar, solo por dinero y sacrificándolo todo, para pasar a trabajar como parte de nuestra realización personal, sin grandes esfuerzos y grandes ganancias económicas, pues estaremos en sintonía con nuestra misión de vida o simplemente, lo que queremos de corazón. De esta forma, comenzamos a manifestar la espiritualidad, a través de lo material, viviendo entusiasmados por lo que hacemos, enamorados de nuestro trabajo, lo que hacemos y la forma en que lo hacemos, dedicando nuestro tiempo al deleite personal, disfrutando sobremanera nuestras relaciones y ocupaciones, a las que estaremos entregados en cuerpo y alma, desarrollando nuestra creatividad, cualidades y dones.

Recordemos que nuestro día a día se basa en elecciones diarias y es aquí donde construimos nuestro futuro. La energía de este mes es fuerte y maravillosa para abrir oportunidades laborales, pero estas no las podremos tomar mientras sigamos atados a lo viejo, no podremos construir lo nuevo sobre bases viejas, por lo que hay que afinar nuestra intuición, centrarnos en el corazón para poder comenzar a elegir desde el mismo, de esa forma, podremos reconocer la oportunidad cuando se nos presente y por supuesto, podremos tomarla sin temor a equivocarnos. En definitiva, la energía está dispuesta, pero nuestras acciones son las que finalmente, CREAN el cambio.

Harumi Puertos

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